Hoy en día, nadie se plantea el diseño de una cabina de pintura sin tener en cuenta el control de los parámetros psicrométricos en su interior. Los niveles de humedad relativa (HR) de hasta 65-75% a menudo se usan para pinturas a base de agua al evitar la evaporación de aerosoles y la aglomeración de pigmentos, tasas de deposición consistentes y prevenir el secado prematuro. Cada fabricante recomienda en sus fichas de producto las condiciones en las que debe aplicarse la pintura, para reducir el consumo y que la transferencia sea más eficiente. No obstante, todos ellos coinciden en que, para obtener unos acabados de calidad, debemos tener en cuenta y controlar la humedad dentro de la cabina.
Como expertos en control de humedad ambiental, consideramos que la forma más económica y eficaz de proporcionar la humedad necesaria al proceso de pintado, es la humidificación adiabática debido a su bajo coste, consumo energético y por la facilidad para operar las piezas pintadas creando un ambiente sano y productivo para el trabajador.
Los humidificadores evaporativos son equipos concebidos para aumentar el contenido de vapor de agua del aire tratado, por evaporación natural del agua en fase líquida. El caudal de aire a tratar pasa a través de un panel celular mojado por un sistema de riego de agua. Este panel está constituido por láminas onduladas de papel inorgánico, con aditivos rigidizantes y absorbentes de agua. La configuración en canales cruzados del panel, ofrece una gran superficie de contacto aire-agua, permitiendo que la evaporación del agua sea máxima a la vez que la resistencia al paso del aire a través del mismo (pérdida de carga) sea mínima. El panel higiénico no pegado de los HEF2E de FISAIR con higiene certificada hace que la durabilidad sea mucho mayor que la del resto del mercado utilizando los equipos con cualquier tipo de agua.
Su carácter modular, hace que estos equipos puedan ser fácilmente integrados en los grupos de aporte y conductos, reduciendo tiempos de instalación y de mantenimiento.
Industrias tan exigentes como: automoción, ferroviaria y aeronáutica, ya consiguen con estos equipos las condiciones deseadas para sus procesos.
Estos equipos tienen la siguiente comparativa con respecto a los sistemas de atomización o pulverización de agua:
Entre algunas referencias importantes del sector destacan:
